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La guardería ABC en Hermosillo, Sonora, es un lugar que permanece grabado en la memoria colectiva de México. En 2009, un incendio cobró la vida de 49 niños, marcando una de las peores tragedias infantiles del país.
A más de una década de los hechos, el sitio volvió a generar titulares, pero esta vez por un acto que ha sido señalado como insensible: la entrada no autorizada de una influencer para grabar contenido.
Sofía Pía Díaz, conocida por su paso por la productora digital Badabun, fue vinculada a proceso judicial el 10 de abril de 2025 por el delito de encubrimiento. El motivo: haber irrumpido en las instalaciones de la antigua guardería ABC para grabar un video que tituló "Así luce la guardería ABC 12 años después".
La publicación, realizada en 2021 en su canal de YouTube, causó profunda molestia entre los familiares de las víctimas, quienes la acusaron de revictimizar el dolor y lucrar con una tragedia.
Antes de verse envuelta en esta controversia, Pía era conocida como conductora en medios locales de Sonora. Más tarde, alcanzó mayor proyección al integrarse a Badabun, un canal especializado en contenido viral que ha sido ampliamente debatido por sus métodos y temáticas.
En redes sociales, Díaz ha formado una audiencia considerable: más de 249 mil suscriptores en YouTube y más de 773 mil seguidores en Instagram. Su estilo mezcla entretenimiento con comentarios sociales, lo que la ha posicionado como una figura recurrente en plataformas como TikTok.
El proceso legal contra Pía Díaz no solo ha puesto en pausa su carrera, sino que también ha abierto el debate sobre los límites del contenido en redes sociales. ¿Hasta dónde puede llegar la búsqueda de visualizaciones? Mientras avanza su proceso judicial, el caso sigue generando reflexiones sobre respeto, memoria y responsabilidad digital.